El Dispensario Viejo

El Dispensario Viejo

En la calle Enrique Jiménez Moya, donde ahora están instalados los bomberos, funcionó por largos años el dispensario médico, en donde se realizaban las emergencias médicas de la época (en los años anteriores al 1975).

La figura más famosa en este centro fue el Sr. Darío Paulino quien funcionaba como auxiliar y para esa época le llamaban practicante y su especialización eran “los rámpanos”, una úlcera infectada en las extremidades inferiores. Esta infección abundaba de tal manera que parecía una epidemia.

Es bueno decir que en este lugar no solo se curaban los llamados rámpanos, sino que se atendía todo tipo de dolencia. Claro, que se hacía lo mejor que se podía si consideramos la escasez de instrumental médico y la falta de médico en la población, pero con lo poco que existía y la buena voluntad de los que practicaban la medicina se conseguía maravilla: Se hacían partos, se cocían heridas, se trataban enfermedades infecciosas y diferentes tipos de virus y la mayor parte con éxito. Aunque había tantas enfermedades mortales como ahora, pero el DISPENSARIO VIEJO fue bien utilizado.

El local que hoy alberga al Cuerpo de Bomberos del Municipio y el cual fue conocido por muchos años, y todavía se le llama, El Dispensario Viejo por su antigüedad y por el servicio tan importante que se realizo allí lo consideramos como una Estampa de Nuestro Pueblo.